Esto es lo que hizo Jesús:
Jesús recorrió todas las ciudades y aldeas de esa región, enseñando en las sinagogas y anunciando la Buena Noticia acerca del Reino de Dios. Y sanaba toda clase de enfermedades y dolencias.
Cuando vio a las multitudes, les tuvo compasión, porque estaban confundidas y desamparadas, como ovejas sin pastor.
A sus discípulos les dijo (A NOSOTROS): La cosecha es grande, pero los obreros son pocos.
Así que oren al Señor que está a cargo de la cosecha; pídanle que envíe más obreros a sus campos.
Entonces y para que sean más efectivos en su trabajo para el Reino de los cielos: Jesús reunió a sus discípulos y les dio autoridad para expulsar espíritus malignos y para sanar toda clase de enfermedades y dolencias. (A NOSOTROS).
Y NOS DICE A NOSOTROS:
Vayan y anuncien que el Reino de los cielos se ha acercado.
Sanen a los enfermos, resuciten a los muertos, limpien de su enfermedad a los leprosos y expulsen a los demonios. Ustedes recibieron gratis este poder (YA TENEMOS EL PODER DEL ESPIRITU SANTO); no cobren tampoco por emplearlo.
Y sepan que: El que los recibe a ustedes me recibe a mí, y el que me recibe a mí recibe al Padre, quien me envió.