¿Sabías que la vida de Cristo no solo está contigo, sino que trabaja a través de ti? Como cristianos, estamos llamados a vivir plenamente conscientes de esta verdad y a practicarla diariamente. Para más enseñanzas como esta, visita nuestra sección de Salvación.
Cristo Vive en Ti: Versículos Fundamentales
La Palabra de Dios afirma que Cristo no solo está a tu lado, ¡sino dentro de ti! Considera estas promesas:
Soy Colaborador de Dios
La Escritura nos recuerda que somos colaboradores de Dios, no solo siervos, sino co-laboradores en su obra redentora:
Somos Templo del Espíritu Santo
En Cristo, somos un templo del Espíritu Santo. Esto significa que Su presencia habita en nosotros, guiándonos y fortaleciendo nuestra fe:
Soy Embajador del Reino de Dios
Como cristiano, eres un embajador del Reino de los Cielos, respaldado por el poder de Dios. Esto significa que representamos a Dios en la tierra, proclamando Su mensaje y realizando Su obra:
La Autoridad de Cristo en Nosotros
La autoridad de Cristo nos ha sido delegada para que actuemos en Su nombre, haciendo milagros, sanaciones y liberaciones. Somos poderosos en Cristo, no por nuestra fuerza, sino por la Suya:
Transformación y Salvación para Todos
El amor de Dios se extiende a todos, y todos pueden ser transformados en nuevas criaturas a través de la obra redentora de Cristo:
Introducción: Descubre la asombrosa verdad: «SI USTED ES CRISTIANO YA TIENE AUTORIDAD ESPIRITUAL DELEGADA POR JESÚS». Exploraremos las Escrituras que revelan la autoridad que cada verdadero cristiano posee y cómo ejercerla para la obra del Reino.
El Poder Delegado en las Escrituras:
- Jesús llamó a sus discípulos y les dio autoridad sobre los espíritus inmundos, para expulsarlos y sanar enfermedades (Mateo 10:1).
- «He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones y sobre toda fuerza del enemigo» — un recordatorio poderoso de la autoridad concedida para enfrentar desafíos espirituales (Lucas 10:19).
- «Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios» — una comisión dada con la autoridad divina (Mateo 10:7-8).
- La designación de autoridad para los discípulos, respaldada por el poder de sanar y expulsar demonios (Marcos 3:14-15).
- La parábola que ilustra cómo Jesús dio autoridad a sus siervos, una imagen de nuestra autoridad como hijos de Dios (Marcos 13:34).
- La capacitación de los discípulos con poder y autoridad para predicar y sanar, enviados por Jesús (Lucas 9:1-2).
- La continua misión de los discípulos, anunciando el evangelio y sanando, una expresión constante de la autoridad delegada (Lucas 9:6).
- Recordatorio final: «Somos embajadores en nombre de Cristo» — representantes con plena autoridad respaldada por el Reino de los cielos (2 Corintios 5:20).
Conclusión: «¡SI USTED SABE QUE TIENE AUTORIDAD DEBE EJERCERLA PARA QUE SUCEDAN MILAGROS A TRAVÉS SUYO!». Descubre cómo el entendimiento y la aplicación de esta autoridad pueden desencadenar milagros y transformar vidas. ¡Ejercer la autoridad espiritual es un acto de fe que puede abrir puertas a lo divino en tu vida y en la vida de aquellos a quienes sirves! 🌟🙏 #AutoridadCristiana #MilagrosPorFe
ES CRISTIANO YA TIENE AUTORIDAD ESPIRITUAL DELEGADA POR JESÚS. Esta es La autoridad espiritual de un verdadero cristiano.
Entonces llamando a sus discípulos, LES DIÓ AUTORIDAD sobre los espíritus inmundos, para que los echasen fuera, y para sanar toda enfermedad y toda dolencia. (Mateo 10:1)
He aquí os doy potestad (AUTORIDAD Y PODER PARA HACERLO)de hollar (pisotear a su antojo) serpientes y escorpiones(Demonios) y sobre toda fuerza del enemigo,(el diablo) y nada os dañará. (Lucas 10:19)
Y yendo, predicad, diciendo: El Reino de los cielos se ha acercado.
Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia.(Mateo 10:7.8)
Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros. (Santiago 4:7)
Y estableció a doce (a sus discípulos), para que estuviesen con él, y para enviarlos a predicar, Y QUE TUVIESEN AUTORIDAD para sanar enfermedades y para echar fuera demonios: (Marcos 3:14-15)
Es como el hombre que yéndose lejos, dejó su casa, y DIO AUTORIDAD A SUS SIERVOS (A nosotros sus hijos), y a cada uno su obra…
(Marcos 13:34)
Habiendo reunido a sus discípulos, les dio PODER Y AUTORIDAD sobre todos los demonios, y para sanar enfermedades. Y los envió a predicar el reino de Dios, y a sanar a los enfermos. (Lucas 9:1-2)
Y saliendo, pasaban por todas las aldeas, anunciando el evangelio y sanando por todas partes. (Lucas 9:6)
Somos embajadores en nombre de Cristo, (Con plena autoridad delegada y respaldada por el Reino de los cielos…es decir por Dios mismo).(2 Corintios 5:20)
¡SI USTED SABE QUE TIENE AUTORIDAD DEBE EJERCERLA PARA QUE SUCEDAN MILAGROS A TRAVÉS SUYO!.
Piensa en ti de esta manera:
Dios quiere que sea un hombre/mujer de Dios para todo el mundo,
debo orar constantemente y hablar con mi Señor Jesús,
caminar con Dios,
trabajar para su gloria,
ser solo un cristiano de verdad,
basarme en las escrituras,
caminar en santidad,
salvar las almas,
vivir enfocado en eso,
no contestar las criticas,
seguir siempre hacia adelante,
superar las prueba y los desiertos,
ser lleno de misericordia y comprensión,
amar a todos,
ayudar a los que pueda,
y siempre procurar hacer la voluntad de Dios.
Dr. Gustavo Isbert
NO TE PREOCUPES DE QUE TE PUEDA FALTAR ALGO…
Esas cosas dominan el pensamiento de los incrédulos, pero su Padre celestial ya conoce todas sus necesidades.
(Mateo 6:32)
SI ESTÁS SIRVIENDO A DIOS, Y TRABAJANDO PARA EL…EL ES UN BUEN PATRÓN Y VA A PROVEERTE TU SALARIO.
Pues la Escritura dice: «No le pongas bozal al buey para impedirle que coma mientras trilla el grano». Y dice también: «¡Todo el que trabaja merece recibir su salario!»*. (1 Timoteo 5:18)
A JESÚS MISMO DIOS PUSO EN EL CORAZÓN DE UNAS MUJERES DARLE EL SUSTENTO CUANDO DEJÓ LA CARPINTERIA PARA DEDICARSE DE LLENO A «LOS NEGOCIOS DE MI PADRE» María, que se llamaba Magdalena, de la que habían salido siete demonios, Juana, mujer de Chuza intendente de Herodes, y Susana, y otras muchas que LE SERVÍAN DE SUS BIENES. (Lucas 8:2-3)