Nuestra iglesia debe ser una Iglesia del tiempo final enfocada en lo más importante:

Exaltar a Dios Padre y a nuestro Señor Jesucristo con la guía del Espíritu Santo.

Debe estar enfocada en salvar almas por todos los medios a nuestro alcance y por el “Evangelismo 1×1.” (Persona a persona), luego liberarlas de sus “trabas” que le impiden servir a Dios (opresiones satánicas, traumas, complejos, vicios etc).

Procurar que reciban el Bautismo en el Espíritu Santo para que puedan servir a Dios de una manera sobrenatural.

Discipularlos brevemente de una manera concreta, directa y práctica.

Darles las “Bases del Cristianismo” y no las tradiciones de nuestras religiones cristianas las cuales muchas no figuran en la palabra de Dios.

Explicarles que cada cristiano es un misionero en su entorno y que la Gran Comisión que nos dio Jesucristo es para todos los cristianos y no solo para los ministros religiosos. Mateo 28:18-20; Marcos 16: 15-20.

Enviarlos a su entorno o al lugar que Dios les indique.

Explicar que deben servir a Dios según los dones o capacidades que Dios les dio (Dios les va a pedir cuentas a cada uno si no lo hace…ver las parábolas de los talentos, minas etc), y que debe encontrar su lugar de servicio en el templo y fuera de el, y hacer “las obras que Dios tiene preparadas de antemano para que hagan”. Efesios 2:10.

(No hay dos cristianos iguales). Usted haga su parte.

Deben procurar “despojarse de todo peso” y “del pecado que nos asedia” (Hebreos 12:1) y vivir enfocados en la obra de Dios sin descuidar su familia y obligaciones.

Hacer de la oración corporativa y personal lo más importante.

Vivir en comunión con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

Recibir revelación de Dios para el “Aquí y ahora”.

Saber lo que está haciendo Dios y pedirle sabiduría para saber como hacerlo.

Cada cristiano debe “brillar” donde esté, cuidar su familia, trabajar “sosegadamente” Mateo 5:16; 2 Tesalonicenses 3:12.

Cuidar su testimonio, darse tiempo para descanso y recreación, cuidar su salud y pedir a Dios sabiduría para desenvolverse cada día en estos tiempos difíciles.

También debe tener la victoria en lo económico dando a Dios lo que es de Dios.

Deben respetar a sus Pastores y orar por ellos, y si necesitan consejos ofrecérselos y como ellos deben caminar en humildad, los aceptarán o explicarán el porque no se hacen las cosas de esa manera.

Amar a todos, y la palabra discriminación no debe ni existir entre nosotros, porque Dios ama a todos, pero si, debemos ser firmes y señalar los pecados de las personas con el amor de Padres que aman a sus hijos descarriados, o que no saben discernir entre lo malo y la bueno y entre lo que le agrada a Dios y lo que no le agrada.

Cada persona que llegue a la iglesia debe experimentar el poder de la transformación que realiza Cristo y su Espíritu Santo. 2 Corintios 2:17; Tito 3:5.

Debe cada cristiano ocuparse en buenas obras según las oportunidades que Dios pone a su alcance. Tito 3:14; Hebreos 13:16.

Debemos predicar y establecer el Reino de Dios con las señales sobrenaturales que le siguen. Mateo 10:7-8.

Debemos trabajar para Dios de esta manera hasta que El nos arrebate o lleve al cielo con El eternamente.

Y Los siervos de Dios más experimentados deben ser sobre todo Padres espirituales para los discípulos de Cristo.

(Hebreos 12:28) Así que, recibiendo nosotros un Reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia.

¿Cómo deben ser las Iglesias del tiempo final?

Entre otras cosas:

Deben exaltar a Dios Padre y Dios Hijo con la guía del Espíritu Santo.

Procurar tener dos o tres Pastores o más, además del Pastor principal. Y distintos encargados de áreas a los cuales remitir cuando van al Pastor principal.

Saber que están viviendo en los “postreros días” Hechos 2:16-21; Apocalipsis 22:12.

Deben tener un gran amor y pasión por salvar a los perdidos.

La prioridad debe ser la evangelización y la oración.

Cada creyente debe ser un factor multiplicador que traiga nuevas personas a la Iglesia.

Se debe procurar la búsqueda del perdido y el seguimiento y cuidado respectivo a fin de que permanezca en la iglesia. Esta debe ser una de sus prioridades.

Deben tener una visión de conquista, prevaleciendo el pensamiento en los creyentes que son guerreros y conquistadores de Dios. Siendo esforzados y valientes, en vez de pensar que son eternos bebés que deben ser constantemente atendidos. Esa mentalidad debe cambiar. También deben dejar toda flojera e indiferencia para trabajar para Dios.

Deben utilizar los medios de comunicación (Radio, TV) seculares (también los cristianos) para llevar el evangelio a todo el mundo de una manera más rápida y efectiva.

Se deben levantar intercesores que oren constantemente al señor por ello.

Es muy importante invertir dinero para evangelizar y extender el Reino de Dios por los medios de comunicación.

Se debe dar énfasis y procurar que todos los creyentes sean Bautizados en el Espíritu Santo para hacer la obra de Dios con poder. Hechos 1:8; 2:4.

Entonces ocurrirán (como cosa normal y constante), milagros, señales y sanidades.

Deben saber cada creyente, que Cristo vive en ellos. 1 Juan

5:11-13; Gálatas 2:20

Deben saber que son salvos y cuidados por Jesús y Dios Padre y nada ni nadie los podrá separar de su mano y de su amor. Juan 10:27:30; Romanos 8:33-39.

Deben hacerse tesoros en el cielo y no buscar solo las cosas de la tierra. Mateo 6:19; Colosenses 3:2.

Deben tener un discipulado intensivo, concreto y directo que dure uno o dos años a lo sumo.

Ej. “Bases del cristianismo” y enseñarles de esa manera a los discípulos “todo el consejo de Dios”. Hechos 20:27. Debe ser teórico y práctico. Como lo hizo Jesús con sus discípulos. Esto lo puede encontrar en www.elcieloesunlugar.com.ar

(Hacer clic en el Blog y encontrará “Bases de Cristianismo” (100 lecciones).

Deben orar y producir muchos obreros del Señor para cosechar, servir y discipular a los nuevos. 2 Timoteo 2:2.

Enseñarles a “Dar lo que ya tienen” (el poder y la autoridad de Dios, etc) a los otros: Hechos 3:6; 9:34; Romanos 15:18-20 y ser varones y mujeres esforzados.

Tener un poderoso ministerio de liberación de demonios y ataduras espirituales y tener personas entrenadas para ello. Ellos deben conocer y ejercer la autoridad que tenemos los cristianos sobre el diablo y sus demonios. Lucas 10:19; Marcos 16:17-18. Cuando las personas tienen “ataduras” espirituales no entienden y no reciben todo lo que Dios tiene para ellas, por eso primero deben ser “verdaderamente libres”.

Antes de sembrar la palabra de Dios en ellos, muchos necesitan (si quieren) ser sanados y liberados. Expulsando de ellos toda opresión demoníaca y toda atadura espiritual (llámelo traumas, complejos, odios, rencores, falta de perdón, problemas sexuales, flojera, baja autoestima etc, etc.). Para otros casos se debe tener sicólogos o médicos cristianos con la sabiduría que Dios les ha dado y llenos del Espíritu Santo.

Se debe trasmitir un espíritu de victoria pues Cristo ha vencido, y nada es imposible para Dios y se debe inculcarle a los creyentes que dejen la flojera, la auto conmiseración, las ofensas, el deseo de ser siempre ayudados y que

¡Se levanten en el nombre de Jesús! y se conviertan en

guerreros útiles para su obra eterna y en vez de estar aburridos y perdiendo el tiempo, lo utilicen de la mejor manera, pidiéndole al Señor fortaleza y valentía para

realizar su obra, que perdurará por toda la eternidad.

Se les debe enseñar a que no desperdicien su única vida.

Las Iglesias de los últimos tiempos deben tener una fuerte adoración y alabanza con músicos llenos del Espíritu Santo que sepan ministrar con la guía del Espíritu, que traigan la presencia de Dios a las reuniones y a la congregación.

Se puede tener una escuela de música.

Deben tener una muy buena enseñanza y revelación de la palabra de Dios tanto para la gente grande, como para los jóvenes y los niños. Esdras 7:10. Con maestros sabios en la palabra de Dios.

Deben tener un poderoso ministerio con los niños y debe haber una enseñanza especial para ellos enseñándoles de diversas maneras, con dibujos e historias Bíblicas la palabra de Dios, enseñándoles a ponerla en práctica y el servicio a Dios, enseñándoles (a los niños) a ganar a otros niños para Cristo, ser llenos del Espíritu Santo, predicar, imponer manos etc.

Lo mismo con las mujeres. Ellas tienen el mismo Espíritu Santo en ellas y es el mismo que tuvo Pablo, Pedro, Juan, etc, etc. El Espíritu Santo no tiene sexo y las mujeres pueden ser grandemente utilizadas por Dios (en sujeción a su Pastor principal o delegado).

Los cristianos deben enseñar a servir a cada creyente pero no por obligación, ni por condenación, sino por amor a Dios, a su obra y a las personas.

Deben cuidar y evangelizar a las personas por reuniones caseras, grupos pequeños o casas de paz (o cualquier otro nombre), pero este es un buen sistema para que todos trabajen y participen en la obra del Señor y envolver a toda la iglesia en la tarea de ganar almas y edificarlas.

2 Timoteo 2:2; Hechos 5:42.

Es la forma más efectiva para formar líderes en la práctica.

No todos estarán en el púlpito, o sirviendo en el templo, pero cualquier creyente puede ganar a muchos fuera de el, (del templo) es decir donde están los perdidos.

Se puede hacer una reunión en cualquier lugar (para eso contamos un manual con muchas lecciones para reuniones de este tipo: “Manual de encuentros Bíblicos”) y si vienen muchos se puede ir haciendo una iglesias anexa a la principal, donde la persona que los ganó para Cristo pueda ser su futuro pastor en sujeción al pastor de la iglesia madre. No tienen que caer el error de irse a otra iglesia más chica “donde le den el púlpito” o hacerse una nueva religión o grupo o ministerio independiente que terminará en otra denominación o en otra división más del cuerpo de Cristo.

La oración e intercesión debe ser la base de todo, (tanto personal como comunitaria).

Todo se logra a través de la oración. Por medio de ella, pasa de “lo invisible” a “lo visible” la visión de Dios, además protegen y cubren a los Pastores de la Iglesia y por medio de la oración es que se cumplen los planes y los propósitos de Dios y suceden milagros.

Vea en Mateo 9:37-38 a Jesús diciéndoles a sus discípulos que oren para que Dios (o sea El mismo) mande más obreros para la cosecha. El podría haberlos mandado sin decirles a sus discípulos que oren pero les dice que se lo pidan. (Medite en esto).

También se debe tener trabajos sociales según Dios guíe a cada Iglesia y según los diferentes llamados a los creyentes que asistan y quieran involucrarse en ellos. Ej. “canasta familiar” o “ropería” para ayudar a los necesitados.

Deben saber que a los Pastores no les corresponde hacer todas las cosas y hay un trabajo para cada creyente y una posición diferente para cada uno en el cuerpo de Cristo. Efesios 4:11-16.

Se debe enseñar a cada creyente a servir.

La iglesia es un equipo que trabaja en armonía (dejando las cosas sin importancia… como celos, peleas internas, deseos de ser reconocidos etc) para el Reino de los Cielos y ganar las batallas para el Señor Jesús contra las huestes de maldad que procuran llevar a las personas al infierno eterno. Nosotros estamos para “los negocios del Padre”.

La iglesia debe ser un refugio y consuelo espiritual y emocional para las personas, un hospital para los pecadores, un centro de adiestramiento para los guerreros

cristianos y como un “club” de encuentro, amistad, entretenimiento, comunión y compañerismo para los que están solos. Se debe pedir sabiduría a Dios para esto y para las actividades a realizar.

Debe considerarse a la Iglesia como un ejército en conquista. Tomando el “botín” y conquistando el reino de las tinieblas y trasladando a las personas al Reino de Dios. Colosenses 1:13-14. Pues él nos rescató del reino de la oscuridad y nos trasladó al Reino de su Hijo amado, quien compró nuestra libertad y perdonó nuestros pecados.

La Iglesia debe tener una estructura de gobierno bien organizada, con un Pastor principal, varios pastores ayudantes y encargados de las distintas áreas o ministerios de la iglesia. Los cuales se deben reunir periódicamente y supervisar las actividades para corregir lo que está funcionando mal o aconsejar como mejorarlo.

Es más bien una autoridad espiritual que “impuesta” donde todos se dan cuanta de “quien es quien” y hay respeto mutuo y colaboración.

Se debe tener un equipo de intercesores por las autoridades espirituales o grupo pastoral.

Las iglesias deben ser prósperas financieramente al dar a Dios lo que es de Dios y de esa manera tener más capacidad de ayuda y serán más eficaces en su labor y con mayor alcance. Esto debe ser el resultado de enfocarse en lo que más le interesa a Dios o sea en sus prioridades, entonces Dios bendecirá con su gran abundancia.

Las prioridades de Dios son la salvación de las almas, las misiones (apertura de nuevas obras), sostén de los Siervos de Dios, enseñanza, ayuda a los necesitados etc.

La iglesia es la amada de Jesús y es una columna y un baluarte da la verdad. Efesios 5:25-32; 1 Timoteo 3:15.

La iglesia debe ser una bendición maravillosa para toda la ciudad y ¡usted debe ser parte de ella!

Predicador Gustavo Isbert

www.elcieloesunlugar.com.ar

Print Friendly, PDF & Email
Clic acá para calificar este articulo
[Total: 0 Average: 0]
Translate »