¡CUIDA MUCHO TUS PALABRAS Y PROCURA HABLAR POCO Y SABIAMENTE!
Estas son palabras de Dios para su pueblo:
(Proverbios 10:19)
En las muchas palabras no falta pecado;
Mas el que refrena sus labios es prudente.
(Proverbios 17:28)
Aun el necio, cuando calla, es contado por sabio;
El que cierra sus labios es entendido.
Debes tener este sentimiento: David pidió esto a Dios.
(Salmos 19:14)
Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti,
Oh Jehová, roca mía, y redentor mío.
Entonces decían esto de David:
(1 Samuel 16:18)
Entonces uno de los criados respondió diciendo: He aquí yo he visto a un hijo de Isaí de Belén, que sabe tocar, y es valiente y vigoroso y hombre de guerra, prudente en sus palabras, y hermoso, y Jehová está con él.
Tu también debes ser prudente en tus palabras, eso es lo que Dios quiere de ti.
Jesús dice:
(Mateo 7:1)
No juzguéis, para que no seáis juzgados.
Hay personas que murmuran, critican, juzgan, hieren al hablar (No seas uno de ellos).
(Romanos 1:30)
murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos, soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres,
Esta es una ORDEN de Dios (no una sugerencia).
(Efesios 4:29)
Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes.
(Efesios 4:29)
No empleen un lenguaje grosero ni ofensivo. Que todo lo que digan sea bueno y útil, a fin de que sus palabras resulten de estímulo para quienes las oigan.
(1 Pedro 4:11)
¿Has recibido el don de hablar en público? Entonces, habla como si Dios mismo estuviera hablando por medio de ti. Así, cada cosa que hagan traerá gloria a Dios por medio de Jesucristo.
Conclusión: habla poco, hazlo sabiamente, se prudente en tus palabras, que sean de estimulo a quienes las oigan y habla como si Dios mismo estuviera hablando por medio de ti