ESTO ES MARAVILLOSO Y DEBES SABERLO Y CONTÁRSELO A TODOS.
(Colosenses 1:13-14)
Pues él (Dios) nos rescató del reino de la oscuridad y nos trasladó al Reino de su Hijo amado, quien compró nuestra libertad (Jesús) y perdonó nuestros pecados.
(Colosenses 1:19-20)
Pues a Dios, en toda su plenitud, le agradó vivir en Cristo. (Cristo era en la tierra verdadero Dios y verdadero hombre) y, por medio de él, Dios reconcilió consigo todas las cosas. Hizo la paz con todo lo que existe en el cielo y en la tierra por medio de la sangre de Cristo en la cruz.
(Colosenses 1:22) ¡LEA DETENIDAMENTE ESTO POR FAVOR!
Pero ahora él (Dios) los reconcilió consigo mediante la muerte de Cristo en su cuerpo físico. Como resultado, los ha trasladado a su propia presencia, ¡YA ESTAMOS ALLI Y VIVIMOS EN SU PRESENCIA! y ahora ustedes son santos, libres de culpa y pueden presentarse delante de él sin ninguna falta.
(1 Pedro 3:18)
Cristo sufrió por nuestros pecados una sola vez y para siempre. Él nunca pecó, en cambio, murió por los pecadores para llevarlos a salvo con Dios.
UN TOTALMENTE PURO, INOCENTE E INMACULADO DIOS TOMO LA INICIATIVA PARA SALVARNOS A NOSOTROS LOS PECADORES Y DEJÓ SU GLORIA Y LA ADORACIÓN DE TODO EL CIELO Y SE HIZO HOMBRE, PARA QUE COMO HOMBRE MURIERA EN LA CRUZ HACIENDO UN SACRIFICIO PERFECTO PARA SALVARNOS DE NUESTROS PECADOS Y EL LLEVAR NUESTRA CULPA EN NUESTRO LUGAR. El vino y ofreció su vida en una muerte atroz para reconciliarnos con Dios. Para que los hombres culpables e indiferentes a El y sin deseos de reconciliarnos, pudiéramos mediante su sacrificio recibir la reconciliación con Dios.
El era “El cordero de Dios que quita el pecado del mundo”. Dios hizo esto para volver a tener amistad con el hombre ser uno con él y restaurar la mistad con aquél que había elegido por voluntad propia desobedecerle, apartarse de El y obedecer al diablo haciendo sus obras pecaminosas. Siendo la principal: el querer vivir haciendo su propia voluntad y no la de Dios. Es decir vivir independientemente de El.
Alguien dijo: El diablo quiso hacer un cielo sin Dios y le salió un infierno. Por eso si el hombre decide vivir sin Dios su destino será el infierno que fue creado para el Diablo y sus demonios. Dios hizo lo imposible para salvarnos y nosotros debemos llevar estas buenas nuevas a todos.
Le ruego que haga una oración ahora mismo y le entregue su vida a Dios decidiendo hacer su voluntad y reciba a Cristo como el salvador y el Rey de su vida.
(Colosenses 1:21-22)
Y a vosotros también, que erais en otro tiempo extraños y enemigos en vuestra mente, haciendo malas obras, ahora os ha reconciliado en su cuerpo de carne, por medio de la muerte, para presentaros santos y sin mancha e irreprensibles delante de él;
(2 Corintios 5:18-20)
Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación, que Dios estaba en Cristo reconciliando consigo al mundo, no tomándoles en cuenta a los hombres sus pecados, y nos encargó a nosotros la palabra de la reconciliación.
Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios.