No se preocupen por nada sino oren a Dios por “todo”.

No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho. (Filipenses 4:6)

(Filipenses 4:7)

Así experimentarán la paz de Dios, que supera todo lo que podemos entender. La paz de Dios cuidará su corazón y su mente…

(Mateo 6:25-27)

Por eso les digo que no se preocupen por la vida diaria, si tendrán suficiente alimento y bebida, o suficiente ropa para vestirse. ¿Acaso no es la vida más que la comida y el cuerpo más que la ropa?

Miren los pájaros. No plantan ni cosechan ni guardan comida en graneros, porque el Padre celestial los alimenta. ¿Y no son ustedes para él mucho más valiosos que ellos?

¿Acaso con todas sus preocupaciones pueden añadir un solo momento a su vida?

(Mateo 6:30-33)

Y, si Dios cuida de manera tan maravillosa a las flores silvestres que hoy están y mañana se echan al fuego, tengan por seguro que cuidará de ustedes. ¿Por qué tienen tan poca fe?

Así que no se preocupen por todo eso diciendo: “¿Qué comeremos?, ¿qué beberemos?, ¿qué ropa nos pondremos?”.

Esas cosas dominan el pensamiento de los incrédulos, pero su Padre celestial ya conoce todas sus necesidades.

Busquen el reino de Dios por encima de todo lo demás y lleven una vida justa, y él les dará todo lo que necesiten.

(Mateo 6:6)

Pero tú, cuando ores, apártate a solas, cierra la puerta detrás de ti y ora a tu Padre en privado. Entonces, tu Padre, quien todo lo ve, te recompensará.

(Mateo 6:8)

Tu Padre sabe exactamente lo que necesitas, incluso antes de que se lo pidas.

(Lucas 12:6-7)

¿Cuánto cuestan cinco gorriones: dos monedas de cobre? Sin embargo, Dios no se olvida de ninguno de ellos.

Y, en cuanto a ustedes, cada cabello de su cabeza está contado. Así que no tengan miedo; para Dios ustedes son más valiosos que toda una bandada de gorriones.

(Lucas 12:29-30)

No se inquieten por lo que van a comer o lo que van a beber. No se preocupen por esas cosas.

Esas cosas dominan el pensamiento de los incrédulos en todo el mundo, pero su Padre ya conoce sus necesidades.

Confíe en Dios para cada detalle de su vida, ríndase a Dios completamente y póngase en sus manos.

Aprenda de memoria estos versículos de la palabra de Dios, ore a Dios y esfuércese en hacerlo y verá milagros.

Dios es real.

Dios hace milagros hoy.

Dios le ama por sobre todas las cosas y es todopoderoso.

El no es un hombre (no lo baje a su nivel), El puede hacer cualquier cosa.

Lo que es imposible para los hombres, es posible para Dios.

El tiene el control total de todos los detalles de su vida, busque hacer su voluntad siempre, porque sino, recibirá disciplina y corrección de El como lo hace un Padre.

El actúa en su vida y en este mundo, mucho más de lo que piensa la gente.

Ore y verá milagros.

Ore y tendrá paz emocional y mental.

Ore y “vea” como Dios le responde (yo tenía y tengo una religión) pero descubrí que Dios es real, orando.

Niéguese a preocuparse en demasía y ore por esas situaciones que le inquietan y espera milagros de todo tipo. Cuando sucedan déle gracias a Dios.

Dios cuidará de usted (no lo dude).

Hay ángeles poderosos enviados por Dios para cuidarle.

Pídale a Dios que envíe sus ángeles guerreros para que le protejan.

Jesús nos ordenó que en todas las necesidades de la vida confiáramos en El completamente.

No tenemos necesidad de llevar la carga por todos los problemas si se los entregamos en las manos a Jesús disfrutaremos de su maravillosa paz.

¡ORE SIEMPRE!: Jesús se apartaba a lugares donde podía estar solo y oraba: ¡HAGA USTED LO MISMO!

Siempre habrá problemas así que aprenda estas cosas y enfréntelos con la ayuda del Dios Todopoderoso.

La oración es “el cable” donde van nuestras peticiones a Dios y descienden sus respuestas a nosotros.

Ej. Del rey Ezequías. 2 Reyes 20:1-6. Dios mismo le dijo a través del profeta Isaías que el moriría, pero se puso a orar y antes que Isaías cruzara el patio recibió la respuesta de Dios y le dijo que le había escuchado y que le añadía a su vida 15 años. Dios tiene el control de la vida y la muerte. (A los 15 años Ezequías murió y se fue al cielo. No a los 14 ni a los 16 años sino a los 15 como dijo Dios.

El tiene el control de TODO. ¡Crea esto! y Confíe en EL. El no es un hombre. ¡El es Dios! Y le ama.

Predicador Gustavo Isbert

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