¡Nunca tengas temor! solo sígueme, YO SOY el Rey de reyes y Señor de señores.
Debes mantenerte en el camino que he elegido para ti.
Tú vives en los días de las grandes maravillas y de la gran oscuridad, pero como el cielo es un lugar asombroso y lleno de maravillas tú llevarás esas maravillas a la tierra.
Todos los días ven a mí y te lavaré del hollín de este mundo, es como cuando te bañas para sacarte la suciedad que se ha adherido a ti en tu diario caminar.
Tú debes preparar a mis guerreros antes de mi venida. Debes “despertarlos” y entrenarlos.
Estas en mi lucha en mis batallas y si no te desanimas nunca puedes perder, habrá momentos que parecerá que esa batalla se pierde como con la toma de Hai por Josué pero luego será siempre una gran victoria.
Mira a la multitud de pecadores: un día pueden ser transformados en mis soldados. Yo haré esto.
Mi palabra es la respuesta para cada problema humano, por eso debes tener mi palabra morando en tu corazón y debes hablarla constantemente.
Debes aprender a caminar en mi presencia y conmigo en medio de este mundo de maldad y prevalecer.
Recibir mi palabra en tu corazón debe ser la búsqueda de todos tus días.
Yo levantaré mi fe hasta lo sumo en mis hijos (y tu debes contribuir a hacer eso) debido al temor, que ahora se libera en la tierra, este irá cada vez más en aumento, he reservado las demostraciones más grandes de fe para este tiempo.
A más oscuridad yo soltaré más luz, a más pecado y enfermedades yo soltaré más de mi poder y mis milagros.
A más ataque de diversas maneras Yo te haré más fuerte y rebotarán en tu escudo, todos los dardos de fuego del maligno.
Las armas que ya te dado y que tienes son más poderosas que cualquiera del enemigo
Ama a los desvalidos y a los más pecadores, te he dado el poder de liberarlos y transformarlos en mis soldados.
Nunca olvides de predicar sobre el poder de transformar a las personas en mis santos, ese poder solo está en mi y en mi Espíritu Santo y moramos en cada uno de mis hijos, cuando tu predicas estás liberando ese poder, abriendo la puerta de mi Reino y los que entran pasan a tener el mismo poder.
También te he dado y ha dado a mis hijos el poder para sanar, ese poder que salía de mi tu ya los has experimentado muchas veces, debes liberarlo al orar por otros y compartir estas enseñanzas con mis hijos que no las saben. ¡Hazlo, con mí sabiduría que te daré en el momento que la necesites!
JESÚS.