Rodolfo y Blanca:

Quiero contarles una experiencia que tuve con mis tíos-abuelos Rodolfo y Blanca.

Ellos eran muy queridos por mí y eran bastante buenos pero no sabían mucho de Jesús y nada de la obra de salvación que el logró para nosotros en la cruz.

Un día Rodolfo se enfermó de muerte y yo fui y le prediqué el mensaje de salvación y Rodolfo lo aceptó con gusto y se arrodilló en una silla y entregó su vida a Cristo.

Blanca su esposa no estaba demasiada convencida pero tomando el ejemplo de su amado esposo oró también (guiada por mí) a Jesús y pidió perdón de sus pecados y le entregó su vida también.

A los pocos días murió Rodolfo y en el velatorio sus pariente empezaron a rezar por el (aquellos que nunca le hablaron antes de Dios), yo estaba presente y sabía que esas oraciones eran estériles porque Rodolfo estaba ya en el cielo con Cristo.

Al poco tiempo Blanca murió y también fue al cielo con Rodolfo y con Cristo para siempre.

La palabra de Dios dice:

(Juan 14:6)

Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

(Hechos 4:12) S. Pedro dice de Jesús.

Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.

(Apocalipsis 3:20) Jesús dice:

He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.

(Juan 1:12)

Pero, a todos los que creyeron en él y lo recibieron, les dio el derecho de llegar a ser hijos de Dios.

Una persona puso en Internet ¡Feliz cumpleaños Papá! EN DONDE ESTÉS, lástima que nos dejaste hace mucho tiempo. Al leer esto se desgarró mi corazón. Esa inseguridad de donde están nuestros seres queridos es terrible.

A las persona hay que presentarle el camino de salvación a través de Jesús en vida.

Quiero decirte que hay solo dos lugares para pasar la eternidad: El cielo con Dios (en el paraíso) o en el infierno con el Diablo en un lugar de horrores y llamas eternas.

Prediquémosles a las personas mientras están vivas porque no hay una segunda oportunidad, nuestro momento es ahora. Lea Hebreos 9:27.

(Hebreos 9:27)

Y así como cada persona está destinada a morir una sola vez y después vendrá el juicio,

(Hebreos 9:28)

así también Cristo murió en sacrificio una sola vez y para siempre, a fin de quitar los pecados de muchas personas. Cristo vendrá otra vez, no para ocuparse de nuestros pecados, sino para traer salvación a todos los que esperan con anhelo su venida.

Yo he asistido a muchos velatorios unos en calidad de Pastor y otros solo de asistente, los comentarios de las personas que no creen en la vida eterna son desgarradores, algunos dicen ¿dónde estará? Otros ¡pensar que no lo voy a ver nunca más! Eso es muy triste.

Quiero decirte que los niños van al cielo directo, aún los abortados, que los que siguen a Jesús van al cielo y los que permanecen en pecados van al infierno.

Debemos predicar entonces el mensaje de salvación por la fe en nuestro Señor Jesucristo a nuestros seres queridos, amigos, conocidos etc. ¡AHORA!

Para más información podés entrar en www.elcieloesunlugar.com.ar

Dios te bendiga mucho: predicador Gustavo Isbert.

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