Seamos llenos del Espíritu Santo y dejémonos transformar y guiar por El.

(Efesios 2:18)

Ahora todos podemos tener acceso al Padre por medio del mismo Espíritu Santo gracias a lo que Cristo hizo por nosotros.

(Efesios 3:11)

Ése era su plan eterno, que él llevó a cabo por medio de Cristo Jesús nuestro Señor.

(Efesios 3:12)

Gracias a Cristo y a nuestra fe en él, podemos entrar en la presencia de Dios con toda libertad y confianza.

(Efesios 4:30)

Recuerden que él Espíritu Santo los identificó como suyos, y así les ha garantizado que serán salvos el día de la redención.

(Efesios 4:23)

Dejen que el Espíritu Santo les renueve los pensamientos y las actitudes.

(Efesios 5:17) Oren y busquen la guía del Espíritu Santo.

No actúen sin pensar, más bien procuren entender lo que el Señor quiere que hagan.

(Efesios 5:18)

Sean llenos del Espíritu Santo

(Efesios 3:20)

Y ahora, que toda la gloria sea para Dios, quien puede lograr mucho más de lo que pudiéramos pedir o incluso imaginar mediante su gran poder, que actúa en nosotros.