Ser un verdadero cristiano es “lo mejor”:

SER UN VERDADERO CRISTIANO ES LO MEJOR:

Nosotros sabemos cuánto Dios nos ama y hemos puesto nuestra confianza en su amor.

Sabemos con cuanta ternura nos ama Dios porque nos ha dado el Espíritu Santo para llenar nuestro corazón con su amor.

Su Espíritu se ha unido a nuestro Espíritu y somos uno con El.

Hemos recibido la vida eterna porque Jesús vive en nosotros.

El tiene la vida en si mismo. El que tiene al Hijo tiene la vida eterna.

Somos hijos de Dios, somos sus herederos y co-herederos con Cristo.

Somos herederos de todas las cosas y de su gloria porque El nos ha llamado a su Reino y gloria.

Ya vivimos en su Reino y somos sus hijos y sus embajadores en este mundo.

Dios nos identificó como suyos al poner en nosotros su Espíritu Santo como un anticipo que nos garantiza todo lo que El nos prometió.

Y su Espíritu en nosotros nos hace más y más parecidos a El (a Jesús) a medida en que somos transformados a su gloriosa imagen (semejanza).

En el cielo (ya libres de los cuerpos terrenales y con los cuerpos celestiales)) seremos semejantes a Jesús y le veremos tal como El es.

Tenemos el Espíritu Santo en nosotros como una muestra anticipada de la gloria futura.

Y tenemos el poder más grande del universo, para hacer las mismas obras de Jesús junto con El y guiados por su Espíritu Santo.

Somos nada menos que el templo del Dios viviente, que vive en nosotros y camina con nosotros.

Somos santos y apartados para Dios.

Somos llamados a vivir siempre con El por los siglos de los siglos.

Gustavo Isbert.