Hablando positivamente.
Viviendo positivamente.
Viviendo en bendición.
Viviendo con el favor de Dios.
Poder decir ¡Dios está conmigo!
¡Jesucristo vive en mí!
Cuento con el mayor poder, el mejor instructor, el mejor maestro: El Espíritu Santo.
Dice Dios: Mi tiempo ya viene, bendice a mis hijos.
Dales “un baso de agua fresca” ellos necesitan eso a través de tus palabras.
Yo bendeciré y cuidaré a tus hijos.
Yo te voy a sorprender.
Todos los días espera una sorpresa de mi parte.
Ama a tu vida.
Deja atrás el pasado.
Todo ayudó a bien.
Extiéndete hacia delante.
Mantente enfocado en mi propósito para ti.
Recuerda que lo que hagas a alguien “A MI LO HICISTEIS”.
Vive “una vida de aventuras” conmigo.
Juntos podemos hacer proezas.
Has oraciones osadas, fuertes y pide lo imposible. “Pruébame” en esto.
Derrama mi amor y compasión.
Nada es imposible para mí.
Yo tengo infinitos recursos, ideas y formas, de hacer que lo que YO quiera ¡Suceda!
Yo puse esos sueños en tu corazón y esos anhelos.
Habla a mis hijos mis palabras.
Yo puedo sanar cualquier enfermedad y arreglar cualquier situación.
Espera algo imposible.
Sé una escalera hacia mí para la gente y hazla subir hacia mí.
Jesús.