Esta es una realidad que va a suceder en un tiempo no muy lejano.
(Mateo 25:31)
Cuando el Hijo del Hombre venga en su gloria, y todos los santos ángeles con él, entonces se sentará en su trono de gloria,
(Mateo 25:32)
y serán reunidas delante de él todas las naciones; y apartará los unos de los otros, como aparta el pastor las ovejas de los cabritos.
(Mateo 25:33)
Y pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda.
(Mateo 25:34)
Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo.
(Mateo 25:41)
Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles.
(Mateo 25:46)
E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna.
Pero esta es otra realidad actual: Dios ya hizo todo para que usted esté entre las ovejas y no entre las cabras, Jesús pagó su pecado en la cruz, le toca a usted en oración entregarle su vida a El y recibirlo en su corazón como su Salvador y Rey: Por favor ¡Dígaselo ahora!
(Juan 3:16)
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.
(Juan 3:17)
Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.