Cosas muy importantes:
1. La Salvación: Juan 10:9; Hechos 16:30-31; Romanos 10:9,13; Mateo 9:22; Lucas 7:50; Juan 3:16-17; Lucas 17: 19; 2 Timoteo 1:9; Tito 3:5.
2. Bautismo en el Espíritu Santo: Hechos 1:5, 8; 2:4; Efesios 5:18; Hechos 19:6; 8:17; 9:17; Hechos 10:45-46; 11:16.
3. Consagración, entrega total a Cristo, decidir hacer siempre su voluntad:
Juan 5:17; 19-20; “No puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace también lo hace el Hijo igualmente. Porque el Padre ama al Hijo, y le muestra todas las cosas que El hace”. Juan 5:30. No puedo yo hacer nada por mi mismo;…no busco mi voluntad, sino la voluntad del que me envió, la del Padre. Juan 6:38; 8:29; 14:31; Mateo 26:39; Romanos 12:1-2; Juan 7:17; 9:31; Hebreos 10:7; 13:21; 1 Pedro 4:2; 1 Juan 2:17. Efesios 6:6. “Como siervos de Cristo, de corazón haciendo la voluntad de Dios”. Juan 20:21 (en dependencia total de mi).
4. Saber el propósito de Dios para su vida, Efesios 5:17 “Sean entendidos de cuál sea la voluntad del señor”; Salmo 138:8; Hechos 13:36 (David) “Sirvió según la voluntad de Dios”; su llamado personal 1 Timoteo 2:7;(Pablo sabía lo que era) 2 Timoteo 1:11; Gálatas 2:7 (y cual era su área de trabajo) Hechos 22:21, y enfocarse en él sin desviarse nunca. Filipenses 3:13-14; Nehemías 6:3. “Dando fruto con perseverancia”. Lucas 8:15.
5. Viviendo en intima comunión con Jesús (como Jesús con el Padre). Juan 1:18 VP “Nadie ha visto jamás a Dios; el Hijo único, que es Dios y que vive en íntima comunión con el Padre, es quién nos lo ha dado a conocer” Ahora el vive en nosotros y debemos vivir en íntima comunión con El y darlo a conocer al mundo. Fuimos creados para tener comunión con Dios. 1 Corintios 1:9 (Jesús) 1 Juan 1:3 (Jesús y el Padre) 2 Corintios 13-14. (El Espíritu Santo). Salmo 25:14; Proverbios 3:2. (Dios). 1 Tesalonicenses 5:10; 4:17.
6. Viviendo en el reino de Dios. Col 1:13. 1 Tesalonicenses 2:12; Lucas 17:21; Mateo 10:7; 12:28; Esperando su segunda venida, Mateo 16:28; Juan 14:3 trabajando en la cosecha final. Mateo 24:14; y brillando en su lugar. Mateo 5:16.
7. El propósito final de Dios es conformarnos a la imagen de Cristo. Romanos 8:29; Efesios 4:13. Y prepararnos para reinar con El. Apocalipsis 5:10; 1:6;
2 Timoteo 2:12; Lucas 22:29-30.
Hechos 22:14-15
1 Corintios 15:58; Apocalipsis 22:12.
Le pido por favor, que busque las citas en su Biblia (y las lea) para comprender mejor el mensaje. Muchas gracias.
ORACIÓN:
Querido Dios: Te doy gracias por amarme tanto, quiero estar contigo por toda la eternidad y disfrutar de tu presencia y amistad ahora y para siempre.
Gracias porque enviaste a tu Hijo Jesucristo a morir por mí en la cruz para pagar mi deuda contigo. Tomo hoy la decisión de arrepentirme de todos mis pecados y te pido perdón por cada uno de ellos.
También tomo la decisión de recibir a Jesús como mi Salvador, Señor y Rey.
Muchas gracias por ser un hijo tuyo y tener ahora tu Espíritu Santo. Te pido que me llenes de él. Recibo ahora el Bautismo con el Espíritu Santo.
También Señor hoy te entrego todo mi ser: espíritu, alma, y cuerpo a ti, para que hagas siempre tu voluntad en mi vida, te ruego que con tu poder me des la capacidad y la fuerza para cumplirla. Quiero hacer siempre lo que te agrada, hacer tu voluntad y cumplir con el plan que tienes para mi persona. Hazme conocer tus planes y propósitos que tienes para mí, quiero seguirte y caminar en yugo contigo.
Quiero caminar muy cerca de ti, para poder oír tu voz y hacer lo que tú quieres que haga. Quiero ser tu colaborador, que trabajemos juntos y ser tu mejor amigo. Señor gracias por ser parte de tu Reino maravilloso y vivir ya en él. Trabajaremos juntos, salvando y guiando almas en la gran cosecha final, esperando el momento en que vengas a reinar literalmente en la tierra, siendo luz en mi entorno y un misionero en mi lugar. Me entrego a tu voluntad, a la guía de tu Espíritu Santo y a tu disciplina, para que me hagas más y más como eres tú. Gracias por todo lo que tienes preparado en el cielo para mí y por tus recompensas eternas.
Gracias porque mi nombre está escrito en el cielo y sobre todo por tu amistad, compañía, amor y protección. Muchas Gracias Dios mío. Amén.
No hay una bendición más grande, ni un propósito mayor en este mundo que ser un hijo de Dios y trabajar junto con El, siendo su colaborador y su amigo. Esto dura para siempre.
Dios le bendiga mucho:
Predicador Gustavo Isbert
Diplomado en Teología
Calle 21 Nº 1563 e/ 30 y32
Miramar BsAs
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