Dios está a favor de usted.

¡DIOS ESTÁ A FAVOR DE USTED! ¡EL LE AMA DE VERDAD!

El dio a su hijo Jesucristo para que muera en lugar suyo y lleve la culpa suya en la cruz.

El puede arreglar cualquier situación en que usted se encuentre por más complicada que sea. No hay nada que Dios no pueda hacer.

No hay nada que El no sepa.

El le comprende a usted y desea ayudarlo, ¡Vaya a El en oración!

Pida milagros y verá milagros.

Usted debe alinearse con la palabra de Dios, ajustar su vida a ella.

Usted debe ajustar su vida a la voluntad de Dios que siempre el lo mejor para usted.

También debe pedirle perdón y arrepentirse de todos sus pecados. Romanos 8:31-32;

1 Timoteo 2:4; Lucas 19:10.

Usted debe volverse a Dios y tomar la decisión de hacer SU voluntad.

Cristo murió por usted para que usted pueda ir el cielo para siempre.

El ama a todos y quiere que todos los hombres sean salvos y disfruten de su compañía eternamente.

¿Se dio cuanta que fue Dios el que lo ha sostenido y ayudado a lo largo de su vida y que El está de su parte?

Jesús vino a buscar y salvar lo que estaba perdido.

El cristianismo es una religión de rescate, Jesús vino a rescatarlo de la esclavitud del pecado y de la muerte.

Jesús dijo “Venid en pos de mí y os haré pescadores de hombres”. Marcos 1:17.

Lea Lucas capítulo 15 y verá el amor de Dios.

De ser una oveja perdida pase a ser una oveja cuidada por Jesús su gran Pastor y de allí pase a ser un guerrero de Dios como Josué. Josué 1:5-9; 1 Pedro 2:25; Hebreos 13:20-21.

(1 Pedro 2:25)

Antes eran como ovejas que andaban descarriadas. Pero ahora han vuelto a su Pastor, al Guardián de sus almas.

(Hebreos 13:20)

Y ahora, que el Dios de paz —quien levantó de entre los muertos a nuestro Señor Jesús, el gran Pastor de las ovejas, y que ratificó un pacto eterno con su sangre

(Hebreos 13:21)

los capacite con todo lo que necesiten para hacer su voluntad. Que él produzca en ustedes, mediante el poder de Jesucristo, todo lo bueno que a él le agrada. ¡A él sea toda la gloria por siempre y para siempre! Amén.